Vida Ascendente (4-3-2012)
VIDA ASCENDENTE
Queridos hermanos en el Señor:
Os deseo gracia y paz.
Vida Ascendente es un Movimiento de Jubilados y Mayores para: 1) crecer en la fe; 2) fomentar la amistad; 3) ser miembros activos de la Iglesia y de la sociedad. Su lema abarca tres aspectos: espiritualidad, apostolado y amistad.
“El objetivo de Vida Ascendente es llevar y fomentar el mensaje evangélico a los jubilados y mayores para que los mismos puedan poner al servicio de este mensaje su caudal de fe, experiencia y tiempo” (Estatutos, art. 4).
El Movimiento se desarrolla alrededor de cinco dimensiones: 1ª) Reúne a sus miembros (de cualquier medio social o cultural) en pequeños grupos de trabajo y oración. 2ª) Crea un ámbito de amistad, para compartir sus preocupaciones y vivencias. 3ª) Ofrece a sus miembros los medios para profundizar en su fe y acreditar su esperanza, logrando que todos vivan esta etapa de su vida en plenitud humana y cristiana. 4ª) Abre cauces para su integración en la misión de la Iglesia, impulsando a sus miembros a una activa participación en ella. 5ª) Les estimula y orienta para que, como ciudadanos responsables, participen en la animación cristiana de la sociedad, adoptando un nuevo estilo de solidaridad con los demás.
Vida Ascendente enseña el arte de envejecer, el arte de seguir siendo útiles y el arte de servir. En nuestra diócesis, este Movimiento tiene una palabra que decir, un lugar que ocupar, una misión que cumplir, una vida que ofrecer. Porque es importante contar con un grupo donde vivir y madurar en la fe, un lugar donde poder compartir la oración, las inquietudes, las ilusiones, los proyectos y la esperanza.
Vida Ascendente va dando pasos, con delicadeza y firmeza, por la peregrinación de la vida, pues Vida Ascendente es también una peregrinación comunitaria que pone en marcha lo mejor de un grupo de hombres y mujeres que han escuchado la llamada del Señor para un compromiso más activo, para revitalizar su sentido de pertenencia a la Iglesia y para vivir con intensidad y alegría su condición de testigos de Jesucristo y apasionados de su evangelio.
Vida Ascendente es como una luz que el Espíritu ha encendido para que brille en medio de nuestros hermanos mayores, necesitados de orientación, compañía, amistad y claridad.
En la “Oración inicial” para las reuniones de Vida Ascendente se reza: “Concédenos entusiasmo y coraje para seguir trabajando en tu viña, a nuestra edad y con nuestras limitaciones. Que sepamos transmitir nuestra experiencia y entregar nuestro tiempo y nuestra persona”.
El nº 48 de la Exhortación apostólica Christifideles laici cita unas palabras que el beato Juan Pablo II pronunció en 1984, dirigiéndose a un grupo de personas mayores: “vosotros no sois ni debéis sentiros al margen de la vida de la Iglesia, elementos pasivos de un mundo en excesivo movimiento, sino sujetos activos de un período humana y espiritualmente fecundo de la existencia humana. Tenéis todavía una misión que cumplir, una ayuda que dar. Según el designio divino, cada uno de los seres humanos es una vida en crecimiento, desde la primera chispa de la existencia hasta el último respiro”.
Recibid mi cordial saludo y mi bendición.
+Julián Ruiz Martorell, obispo de Jaca y de Huesca.